En un contexto donde la Argentina comienza a abrirse y sorprenderse dentro del Fútbol Femenino, Alegra, con tan solo 12 años, desgasta la pelota. La pequeña de la localidad cordobesa de Freyre ya debutó en la Primera de Unión de Santa Fe y entrenó en la AFA preseleccionada con las juveniles sub 15 y sub 17.
Alegra Risso cautiva a cada espectador que se encuentre viéndola en la cancha. Desde muy pequeña juega a la pelota en Freyre, la localidad cordobesa que tiene unos 6200 habitantes y donde se destacó en 9 de Julio hasta pasar a jugar en la Primera del equipo femenino de Unión de Santa Fe.
Sin embargo, su magia no termina allí, ya que desde principios de julio se encuentra entrenando en el predio de la AFA, al haber sido preseleccionada para los combinados juveniles de Argentina sub 15 y sub 17. Sus espectadores se sorprenden cada vez que la ven, ya que la pequeña con la casaca de la Selección descose la pelota.
Darío y Mariela, sus padres, relataron que desde muy pequeña le pedía a sus maestras de primaria o jardín que se pusieran en el arco para que ella pateara penales. Es algo que a sus padres les sorprendía y a su hermana mayor, Macarena, también.
«Al principio medio como que chocó un poco. Nunca me esperé que mi hija quisiera jugar al fútbol. Pero ahora ya nos acostumbramos y la llevamos a todos lados. Ella desde chica anda con una pelota en el pie. Todo lo aprendió jugando con los amiguitos”, le relató el padre a Perfil Córdoba.
Fue así que una maestra motivó a su familia para que llevaran a Alegra a jugar al club 9 de Julio, donde no sólo jugo sino que también logró destacarse entre los otros nenes. Sin embargo, la liga no le permitía jugar partidos oficiales. Para ella eso no significó una frustración, sino que sólo quería jugar, amistosos o entre amigos, jugar.
La pequeña genera tanta emoción que el freyrense César Carignano, ex delantero de Colón, América de México y otros reconocidos equipos, resaltó: «Alegra ama el fútbol desde siempre».
El exitoso jugador continuó: «en Unión (Santa Fe), la pelota le ha sonreído y la ha estimulado a seguir, como su familia la estimula viajando a su lado, haciendo un esfuerzo que solo el amor tolera”. Se refiere a su decisión, de hace más de ocho meses, de dejar el club del pueblo y comenzar a viajar los fines de semana a Santa Fe.
En noviembre de 2018 Alegra jugó en la Selección de la liga santafesina en el Torneo Desarrollo, organizado por la AFA y la Conmebol. Allí, la pequeña no pasó desapercibida en su posición de enganche o volante central y quedó preseleccionada para las selecciones juveniles argentinas.
«Nunca sentimos que haya sufrido prejuicios o discriminación por jugar al fútbol. En la zona nunca, en el pueblo menos. Al contrario, causa cierto asombro y todos quieren ir a verla jugar. Está bueno eso. La llaman de distintos equipos de la zona para jugar y ella va. A ella sólo le interesa jugar a la pelota», cuenta Darío Risso, papá de la pequeña crack cordobesa.
En las últimas semanas, con sólo 12 años jugó con la Sub-17 y la Sub-15 llevando la casaca de la Selección argentina. Además, según le manifestaron sus entrenadores de la albiceleste, seguirá estando en observación durante todo el año.
«Estamos chochos de verla con vestimenta de la Selección argentina, por todo el sacrificio que estamos haciendo. La nafta subió y no tenemos ayuda económica. Pero ella es muy feliz jugando a la pelota. En la familia nos privamos de cosas para que ella pueda entrenar», narra Darío Risso, y agrega: «Ella jugar en Unión o jugar en la Selección, es como si estuviera jugando en la canchita del pueblo. Tiene un perfil muy bajo. Ella con tal de jugar al fútbol, no le importa nada».
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