Parece que los episodios de extrema crueldad a los animales no sólo ocurren en Argentina, sino también en los países vecinos. El fenómeno de envenenamiento no es algo novedoso pero, en los últimos tiempos, se ha vuelto la forma más utilizada por quienes desean asesinar a los animales que están en situación de calle.
Así ocurrió durante el fin de semana último en Quito, Ecuador, donde más de 20 perros rescatados de tres fundaciones diferentes murieron, tras ser alimentados por balanceado con veneno que habían recibido de una donación.
«Estamos investigando cómo sucedió. Al parecer en una funda de alimento sellada que fue dejada en un centro de acopio, enviaron una funda de balanceado con veneno», explicaron miembros de la Fundación Acción Animal Ecuador, según revela el diario El Universo. Ahí, tres perros fallecieron y cinco más se encontraban mal de salud.
Otra de las fundaciones afectadas por este aberrante hecho es Defensa de la Visa Animal Ec que, en su cuenta de Facebook, compartió un relato de lo que fue aquel sábado interminable y lleno de indignación:
María Alejandra Reyes, de la Fundación Lucky Bienestar Animal Ecuador, en un video publicado en su cuenta de Facebook señaló que perdieron a ocho y contó que recibieron donaciones de balanceado por libras: «No sabemos de cuál de los centros de acopio fue o si fue de la gente que directamente dona aquí». Según sus palabras, «uno de los animales estuvo varias horas agonizando, mientras otros murieron en 25 minutos».
«El diagnóstico veterinario (…) es envenenamiento y es un veneno combinado. No sabemos qué tipo de veneno, haremos los análisis y nos pronunciaremos cuando esté todo esto terminado», agregó.
Los refugios, también compartieron las historias de vida de los animalitos que han fallecido desde el sábado. Uno de ellos fue ‘Nacho’, quien fue rescatado de las calles por Acción Animal Ecuador y ya había logrado superar una cirugía y estaba por ser dado en adopción, pero finalmente murió por la acción de una personas que hasta ahora no ha sido identificada.
Este aberrante hecho llegó hasta el alcalde de la ciudad, Jorge Yunda, quien a través de su cuenta de Twitter, repudió lo sucedido. «Ponemos a disposición nuestros hospitales Urbanimal Quito y toda la ayuda que requieran», dijo.
Mantenemos firme nuestro compromiso de proteger la fauna urbana de la capital. Brindaremos todo el apoyo a las víctimas de este hecho infame sucedido en Quito.#QuitoGrandeOtraVez pic.twitter.com/R0derNrg2m
— Municipio de Quito (@MunicipioQuito) July 13, 2019
Después de lo sucedido, los alimentos recibidos en la donación debieron ser incinerados. Y se abrió una «investigación caso presunto envenenamiento», de la mano de las tres fundaciones afectadas y con la colaboración de la alcaldía de Quito.
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