A pesar de pertenecer ambos al mismo espacio político, tuvieron una acalorada discusión por el uso de lo tiempos en los discursos. Tras cerrarle el micrófono al Senador Naidenoff y darle la palabra a la Senadora Fiore, mientras ésta hablaba, la Presidenta de la Cámara sin darse cuenta que tenía su micrófono abierto, propinó un insulto al Senador formoseño: «Es un pelotudo, que no rompa las pelotas».
Naidenoff cuestionó a Michetti que se permitía extenderse en el tiempo de discurso a algunos senadores, y a otros no, lo que consideró injusto, a lo que la Vicepresidenta respondió «Usted no tiene que conducir la sesión, la conduzco yo».
El Senador expresó que a pesar de haberse definido respetar los límites de tiempo en los discursos, se hizo bajo la condición de no ser demasiado restrictivos, haciendo alusión a la negativa de minutos extra solicitada por su compañera de bloque, Pamela Verasay.
«Usted conduzca pero deje cerrar, presidenta», expresó Naidenoff, ante lo que Michetti no sólo no respondió, sino que dio por terminada la discusión cortándole el micrófono al senador radical. La discusión puso en evidencia la tensión entre ambos por las diferentes posiciones frente a la legalización del aborto.
