La sonrisa de Ivan: Una historia conmovedora

Ivan es un pibe de barrio, vive en la calle, y aparentemente consume drogas. Sin embargo, nunca hay que dar nada por perdido. Ivan es fiel ejemplo de ello.

Días atrás, Fundación Un Tatuaje por una Sonrisa, se encontraba en el barrio Maldonado, de la capital cordobesa. Estaba colaborando con la escuela de fútbol Maldonado FC: con la ayuda de la gente, donaron conos y pelotas, y llevaron golosinas para todos los niños que van allí a entrenar.

Sin embargo, a Juan, fundador de Un Tatuaje por una Sonrisa, no le pasó desapercibida la presencia de un joven adolescente de 15 años que no participaba de los juegos pero que tampoco podía apartar su mirada de la cancha. Los tristes ojos de Ivan cautivaron a Juan, quien se acercó a conocerlo un poco.

Ivan no estaba jugando porque «no hay división para su edad». Juan, conocido por su alma caritativa y con esa iniciativa de ayudar al otro desinteresadamente, decidió centrar su atención en el joven de mirada perdida y ojos tristes. Le dijo que, para los días venideros, tenía que buscar chicos de su edad para crear una categoría en la que él pueda estar: «mientras tanto, el profesor Jonathan te va a necesitar con los más pequeños» finalizó el tatuador.

Eso fue todo lo que necesitó Ivan para que las lágrimas se asomaran en sus ojos, acto siguiente, se abalanzó a los brazos de Juan y todos los presentes no pudieron contener el llanto de emoción. Hoy, Ivan pasa sus tardes como ayudante del profesor de fútbol, participa de las prácticas y con una sonrisa en su rostro ayuda a los más chicos, al mismo tiempo que comparte y disfruta con alegría.